Fernando Barri: “El 100% de los incendios que se producen en esta época son producidos por humanos”
El doctor en Ciencias Biológicas del CONICET, Fernando Barri, afirmó en una entrevista exclusiva con Marca Informativa Córdoba que los incendios forestales en la provincia no tienen un origen natural y, en su mayoría, son intencionales o producto de negligencias humanas. Barri también criticó la falta de control del Estado sobre las prácticas inmobiliarias y agrícolas que fomentan el fuego.
En una entrevista exclusiva con Marca Informativa Córdoba, Fernando Barri, doctor en Ciencias Biológicas del CONICET, se refirió a la preocupante situación de los incendios forestales en la provincia de Córdoba. Según Barri, “no hay incendios naturales en esta época del año”, lo que significa que la totalidad de los incendios registrados son producto de la acción humana, ya sea de manera intencional o por accidentes derivados de prácticas peligrosas.
Barri explicó que, aunque el gobierno suele afirmar que el 99% de los incendios son intencionales, no se presentan evidencias concretas que respalden esta afirmación. «No hay datos ni pruebas que demuestren quién o por qué se prende fuego. En muchos casos, las causas son ambiguas y no hay investigaciones claras sobre los responsables», subrayó.
El investigador destacó que una de las principales sospechas recae en la especulación inmobiliaria. Según él, a pesar de la Ley de Bosques y la Ley de Fuego, algunas personas prenden fuego deliberadamente para eliminar vegetación nativa y facilitar futuras urbanizaciones. «El fuego se utiliza como una herramienta para cambiar el uso del suelo. Contratar maquinaria o hacer un desmonte masivo sería mucho más evidente, por lo que prefieren usar el fuego», explicó.
El rol del Estado en la prevención y control
Barri también hizo énfasis en la necesidad de un mayor control por parte del Estado, tanto a nivel provincial como municipal. Criticó la falta de firmeza en la aplicación de las normativas existentes y sugirió que si los municipios fueran más estrictos respecto a la prohibición de urbanización en zonas de bosque nativo, los incendios disminuirían considerablemente.
El especialista también mencionó que, aunque es importante invertir en recursos como aviones hidrantes y equipamiento, es fundamental centrar los esfuerzos en la prevención y el monitoreo de las áreas de mayor riesgo.
Barri también criticó la costumbre de algunos productores rurales de realizar quemas controladas para promover el rebrote del pasto para el ganado, una práctica que, aunque prohibida, aún persiste en algunas regiones.
El doctor en Ciencias Biológicas subrayó la importancia de preservar el bosque nativo, que, al contener más humedad, actúa como una barrera natural contra el fuego.
