Se apagó el fuego, se encienden las sospechas
Mientras las llamas arrasaban con parte del edificio de APROSS, las redes sociales se inundaron de especulaciones, relacionando el siniestro con la reciente ola de detenciones por una millonaria estafa en la obra social provincial.

El incendio que consumió el segundo piso de la sede de la Administración Provincial del Seguro de Salud (Apross) este Viernes Santo ha generado un fuerte revuelo. Mientras las llamas arrasaban con parte del edificio, las redes sociales se inundaron de especulaciones, y la oposición política no tardó en vincular el siniestro con la reciente ola de detenciones por una millonaria estafa en la obra social provincial.
El primero en reaccionar fue el diputado nacional de la UCR, Rodrigo de Loredo, quien no dudó en relacionar el incendio con la investigación en curso por fraude. “El Apross fue noticia dos veces esta semana. El miércoles, porque detuvieron a 13 personas, entre ellas cinco policías, por una estafa a la obra social de los estatales. Hoy, porque se incendia el edificio”, escribió en su cuenta de la red social X.
De Loredo no escatimó en críticas al Gobierno provincial y sugirió que el incendio podría haber sido una táctica para destruir pruebas cruciales. “Quién sabe cuánta documentación de prueba se estará perdiendo. Siempre todo es oscuro en la Córdoba del peronismo”, afirmó, apuntando directamente al Gobierno de Martín Llaryora.
En la misma línea, el concejal Martín Juez, hijo del reconocido ex senador Luis Juez, también expresó sus dudas sobre las coincidencias entre las detenciones y el incendio. “Qué coincidencia, che… cae la banda que vendía certificados truchos y a las horas, en feriado, justo cuando no hay nadie se incendia el edificio donde operaban”, señaló en su cuenta de Twitter, y concluyó: “En Córdoba pasan cosas. Pero nadie pregunta nada. Cómo duele”.
Este incendio se produce apenas dos días después de que la Policía detuviera a 13 personas en el marco de una investigación por defraudación millonaria a Apross, un caso que ya había implicado a 36 detenidos desde febrero. Entre los arrestados, se encuentran cinco policías, un médico y un ex empleado del área de sistemas de la obra social. La estafa consistía en cobrar consultas médicas a afiliados ficticios, así como en la venta de medicamentos obtenidos mediante recetas falsas.
El Ministerio Público Fiscal (MPF) explicó que las primeras detenciones se produjeron cuando se descubrió que, en diversas farmacias, se retiraban medicamentos para luego revenderlos en el mercado negro. En la misma línea, se hicieron arrestos relacionados con la emisión de recetas truchas para obtener productos farmacéuticos destinados a personas diabéticas.
Frente a las acusaciones de la oposición, desde el Gobierno provincial subrayaron que la investigación por las estafas comenzó a raíz de una denuncia interna del propio Apross, realizada por un afiliado que había notado que consultas médicas no realizadas aparecían en su portal de autogestión.