Fernando Albareda: «Las amenazas eran constantes, pero nunca imaginé esto»
Fernando Albareda, hijo del subcomisario Ricardo Fermín Albareda y de Susana Montoya, quien fue asesinada este fin de semana, compartió detalles sobre las constantes amenazas que recibió su familia y el impacto de la tragedia.
El dolor y la angustia dominan a Fernando Albareda, hijo del subcomisario desaparecido Ricardo Fermín Albareda, quien este fin de semana sufrió la pérdida de su madre, Susana Montoya, en un brutal asesinato que conmociona a la comunidad de Córdoba. En un conmovedor diálogo con Marca Informativa Córdoba, Fernando relata los difíciles momentos que vivió al encontrar a su madre sin vida y las amenazas previas que la familia había recibido.
Fernando estaba en su oficina en la Secretaría de Derechos Humanos en la delegación de Córdoba cuando comenzó a preocuparse por la falta de comunicación con su madre. «Insistí e insistí telefónicamente durante todo el día para comunicarme con ella porque sabía que tenía que hacerse unos análisis médicos», comentó. Sin embargo, al no obtener respuesta, decidió ir a buscar a su hijo al club de fútbol y luego pasó por la casa de su madre.
Al llegar a la vivienda, Fernando notó que algo no estaba bien: «El televisor estaba prendido, había una radio en el patio encendida, y las ventanas estaban todas cerradas, algo que mi mamá no hacía habitualmente». Desesperado, Fernando intentó comunicarse con su madre sin éxito. Fue entonces cuando decidió pedir ayuda a una vecina para subir al techo de la casa. «Cuando subí al techo y caminé por la medianera, vi el cadáver de mi madre en el patio», relató, visiblemente afectado.
La escena del crimen fue especialmente perturbadora. Además de los golpes en la cabeza que sufrió Susana Montoya, Fernando se encontró con una amenaza escrita en la pared: «Los vamos a matar a todos. Ahora vamos por tus hijos. #Policía». Esta inscripción llevó a los investigadores a considerar que el móvil del crimen podría estar relacionado con la historia familiar de la víctima, ya que Susana era madre de Fernando, hijo del subcomisario Ricardo Fermín Albareda, quien fue torturado y desaparecido durante la última dictadura militar en Argentina.Fernando también recordó las amenazas que recibió en diciembre del año pasado, cuando asumió el nuevo gobierno de Javier Milei: «Recibí amenazas anónimas que incluían mensajes escritos y balas calibre 22 largo». Estas amenazas, aunque no habían sido tomadas en serio en su momento, ahora cobran un nuevo y siniestro significado a la luz del asesinato de su madre.
Durante el velatorio, organismos de Derechos Humanos de Córdoba emitieron un comunicado solicitando la “urgente investigación y esclarecimiento del hecho, como así también las amenazas sufridas por todos los integrantes de su familia, denunciadas con anterioridad”. Además, pidieron por “la seguridad y protección efectiva” de Fernando Albareda y su familia.
El fiscal Juan Pablo Klinger dispuso una serie de medidas para esclarecer el hecho, incluyendo la recolección de evidencia en la escena del crimen y la revisión de cámaras de seguridad en la zona.
Fernando Albareda concluyó sus declaraciones agradeciendo el apoyo recibido: «Agradezco el acompañamiento y el cariño de todos en este momento tan difícil. Mis hijos son mi prioridad ahora, y espero que se haga justicia por mi madre».