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noviembre 21, 2024
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Ricardo Albareda fue aceptado como querellante en la causa por el asesinato de su madre

La Justicia permitió que Ricardo Albareda, hermano de Fernando Albareda, participe como querellante en la investigación del homicidio de su madre, Susana Montoya. Ricardo, quien sospecha de la responsabilidad de su hermano, buscará obtener justicia ante el crimen que sacudió a su familia.

El caso del asesinato de Susana Montoya, viuda del subcomisario desaparecido Ricardo Fermín Albareda, continúa avanzando con la decisión de la Justicia de aceptar a Ricardo Albareda, uno de los tres hijos de la víctima, como querellante en la causa. Juan Pablo Bastos, abogado de Ricardo, confirmó este martes que su cliente «no tiene dudas» sobre la culpabilidad de su hermano, Fernando Albareda, quien se encuentra detenido y es el principal sospechoso del crimen.

Ricardo Albareda, quien desde el inicio de la investigación expresó sus sospechas sobre la participación de Fernando en el homicidio, ahora podrá participar activamente en la causa y tener acceso al expediente. Según su abogado, Ricardo comenzó a dudar de su hermano inmediatamente después de descubrir el cuerpo de su madre en la casa familiar del barrio Ampliación Poeta Lugones.

Las sospechas de Ricardo no son infundadas. Bastos reveló que su cliente observó detalles en la escena del crimen que le hicieron pensar en la culpabilidad de Fernando. Entre estos, destacó la falta de signos de violencia en las puertas y ventanas de la casa, lo que sugiere que la víctima conocía a su agresor y que este pudo haber utilizado una llave para ingresar. Además, se ha mencionado el interés económico de Fernando por una suma de 70 millones de pesos que la familia debía recibir como resarcimiento por la desaparición de su padre durante la última dictadura militar argentina.

Lee más: Las sospechas de su hermano: claves en la detención de Fernando Albareda

La relación entre los hermanos, según testimonios de allegados a Susana Montoya, era distante y marcada por tensiones. Ricardo convivió con su madre durante años, mientras que Fernando estuvo ausente durante largos períodos, lo que dificultó aún más la dinámica familiar. Este distanciamiento, sumado al interés de Fernando en la indemnización, ha sido interpretado por Ricardo como un posible motivo para el asesinato.

Por su parte, la defensa de Fernando Albareda insiste en la inocencia del acusado. Claudio Juárez Centeno, abogado de Fernando, cuestionó la actuación de la fiscalía, señalando que las amenazas recibidas por la familia en diciembre pasado, que inicialmente se consideraron auténticas, resultaron ser falsas. Juárez Centeno subrayó que su cliente tiene pruebas de que no estuvo en el lugar del crimen en el horario en que se estima ocurrió el asesinato.

A medida que avanza la investigación, la aceptación de Ricardo Albareda como querellante refuerza su posición en el caso y le permitirá seguir de cerca cada paso de la causa. Bastos aseguró que Ricardo no busca ningún beneficio económico, sino que su único objetivo es lograr justicia para su madre y esclarecer las circunstancias de su trágica muerte. Con Fernando Albareda como principal acusado, el proceso judicial continuará su curso, en busca de la verdad detrás de este atroz crimen que ha conmocionado a la comunidad cordobesa.