Investigan si dos clínicas en Córdoba explotaban mujeres para subrogación de vientres
La Justicia de Córdoba investiga a dos clínicas por presunta explotación de mujeres vulnerables en subrogación de vientres. Hay nueve imputados, entre ellos médicos, abogados y psicólogos.
La Justicia de Córdoba investiga un posible caso de trata de personas relacionado con la subrogación de vientres. La causa involucra a dos clínicas locales, Fecundart y Nascentis, que estarían explotando a mujeres en situación de pobreza para gestar a cambio de dinero. Hay 14 casos bajo investigación, con nueve imputados, entre ellos médicos, abogados y psicólogos.
El caso surgió en marzo pasado a raíz de una denuncia anónima, lo que llevó a que los fiscales Enrique Senestrari y Carlos Gonella, junto con la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (Protex), comenzaran a investigar. Aunque en Argentina no existe una ley que regule la subrogación de vientres, el vacío legal complica la causa, obligando a los fiscales a considerar otros delitos como la trata o el trabajo forzado.
El vacío legal de la subrogación de vientres
Actualmente, la subrogación de vientres en Argentina no cuenta con un marco legal claro. El único procedimiento disponible es un trámite judicial mediante el cual los futuros padres y la gestante deben presentarse ante un juez para obtener su aprobación. Sin embargo, el Código Civil establece que el bebé nacido es hijo de la madre que dio a luz, lo que agrega complejidad al proceso.
En la causa en curso, los fiscales investigan si las mujeres involucradas en estos 14 casos tenían autonomía en su decisión de participar o si, por el contrario, fueron coaccionadas debido a su situación económica o psicológica. La clave es determinar si hubo abuso de su vulnerabilidad y si las clínicas actuaron de manera ilegal al ofrecerles dinero a cambio de gestar.
Nueve imputados y dos clínicas bajo investigación
Entre los imputados se encuentran el director médico de Fecundart, José Pérez Alzaa; la psicóloga Luciana Szrank; y el director médico de Nascentis, César Sánchez Sarmiento. Junto a ellos, también están implicados otros abogados y psicólogos que habrían facilitado el proceso. Hasta el momento, no se han ordenado detenciones preventivas, pero las indagatorias continúan.
Las investigaciones apuntan a que estas clínicas captaban mujeres en situación vulnerable y les ofrecían dinero por gestar. Una vez entregado el bebé, las mujeres no recibían más seguimiento y regresaban a su precaria situación. Fuentes judiciales aseguran que algunas de las gestantes eran madres solteras con varios hijos, desempleadas y sin la madurez suficiente para entender las consecuencias del proceso.
Un caso que podría sentar precedente
La Justicia está trabajando en determinar si estas prácticas pueden ser consideradas trata de personas o trabajo forzado. Por ahora, el vacío legal sobre la subrogación de vientres en Argentina deja en gris estas situaciones. Los fiscales buscan comprobar que las mujeres fueron explotadas y que no actuaron de manera voluntaria.
Se espera que este caso siente un precedente legal en el país. Hasta ahora no se había tratado una causa de esta naturaleza en la Justicia argentina. Las audiencias continúan bajo un fuerte hermetismo y con secreto de sumario.
