Detuvieron a cuatro personas en la causa por el secuestro y asesinato de Santiago Aguilera
Los arrestos se conocen a seis meses de la finalización del juicio, donde se condenó a dos personas, una de ellas a perpetua y la otra a 12 años. La condena podría sufrir modificaciones.

Santiago Aguilera fue secuestrado, torturado y asesinado en agosto de 2022.
La investigación por el secuestro y asesinato de Santiago Aguilera registró este lunes una sorpresiva novedad con la detención de cuatro personas en distintos operativos realizados en la provincia de Córdoba. Los procedimientos fueron llevados adelante por la Dirección General de Investigaciones Criminales y se enmarcan en la causa que conduce el fiscal federal Maximiliano Hairabedián.
Por el momento no se revelaron las identidades de los detenidos ni el grado de vinculación que tendrían con el hecho. Desde la Policía provincial informaron que los detalles oficiales serán brindados en las próximas horas por el ministro de Seguridad, Juan Pablo Quinteros.
Novedades tres años después
El caso Aguilera conmocionó a la provincia en agosto de 2022. Santiago, de 18 años, fue secuestrado entre el martes 16 y el miércoles 17 de ese mes en el paraje Chuchiras, en cercanías de Las Tapias. Tras varios días de intensa búsqueda, su cuerpo fue hallado sin vida el domingo 21 de agosto en la zona de Boca del Río, en la ciudad de Villa Dolores.
En el marco de la causa principal, Walter Gil fue detenido el 18 de agosto de 2022, apenas dos días después del secuestro, y posteriormente condenado a prisión perpetua como autor material del secuestro extorsivo y del homicidio. Por su parte, Julio César Ramírez fue arrestado el 26 de abril de 2023 y condenado a 12 años de prisión como partícipe secundario, acusado de haber manipulado el teléfono celular de la víctima. El juicio finalizó el 3 de junio pasado.
Sin embargo, la semana pasada el expediente volvió a ocupar el centro de la escena judicial a partir de una novedad de alto impacto: la posible caída de la condena de Ramírez. Según trascendió, una prueba clave utilizada durante la investigación podría haber sido falsa. La acusación sostenía que Ramírez había ingresado a la cuenta de Gmail de Aguilera el día del crimen, basándose en el registro de una dirección IP que finalizaba en 195.
De acuerdo con la investigación que ahora encabeza el fiscal Hairabedián, quien habría accedido realmente a esa cuenta desde un hotel de Villa Dolores sería un investigador que actuaba bajo las órdenes del entonces fiscal Enrique Senestrari. Esta revelación abrió un nuevo frente judicial y puso bajo revisión la sentencia dictada contra Ramírez.