Choque del colectivo en la Chacabuco: allanaron la empresa e imputaron al conductor

El chofer del colectivo de la empresa Ersa involucrado en el accidente de este jueves en la esquina de Chacabuco y boulevard Illia, que dejó a dos mujeres heridas, fue imputado por lesiones culposas. Así lo confirmó el fiscal a cargo de la investigación, Ernesto de Aragón, en declaraciones a El Doce. Además, se realizó un allanamiento en la empresa para recabar más información sobre lo sucedido.

El accidente ocurrió alrededor de las 12:00, en plena hora pico en el centro de Córdoba. Según los detalles brindados por el fiscal, la unidad de la línea 23 operada por Tamse avanzó sin control durante casi 100 metros después de que el conductor, debido a un desperfecto mecánico, se bajara junto con los pasajeros. El colectivo, sin nadie al mando, terminó deteniendo su marcha al incrustarse contra un kiosco.

De acuerdo con el funcionario, las mujeres afectadas están fuera de peligro, aunque se esperan informes médicos para conocer la gravedad de las lesiones. Asimismo, se están analizando los registros fílmicos de cámaras de seguridad de domos, comercios y del mismo colectivo para esclarecer los detalles del accidente.

En relación al chofer, De Aragón destacó que no hubo intención directa de causar el siniestro, aunque se refirió a la posibilidad de que exista una responsabilidad culposa por su parte. Según explicó, la investigación está centrada en determinar si el freno de mano del colectivo no fue colocado correctamente. De hecho, un video captado por una cámara interna del vehículo muestra que el freno de mano podría no haber estado puesto al momento del incidente.

El presidente de Tamse, Eduardo Ramírez, detalló a El Doce que el inconveniente inicial se debió a un problema con los «pulmones de aire» del sistema de frenos del colectivo. Según Ramírez, el sistema de frenos cuenta con tecnología avanzada para anticipar fallas y activar alertas, pero en este caso, el chofer no detectó de inmediato que el sistema de frenos no estaba funcionando correctamente, por lo que decidió hacer descender a los pasajeros y reportar el incidente a la empresa. Sin embargo, en ese momento, la unidad comenzó a avanzar sin control hasta impactar contra el kiosco.

El presidente de la empresa de transporte también analizó que una posible falla en el freno de mano, o bien una negligencia en su uso, podría haber sido la causa del accidente, aunque no descartó que pudiera haber habido una falla mecánica que aún no se haya detectado. La investigación sigue en curso para esclarecer las causas del siniestro y determinar las responsabilidades pertinentes.