León XIV: «la Misión es urgente en los lugares difíciles»

En su primera misa oficial como Papa, León XIV subrayó la urgente necesidad de llevar el testimonio cristiano a aquellos entornos donde la fe es ridiculizada o marginada. La ceremonia se celebró en la Capilla Sixtina con la presencia de los cardenales, quienes acompañaron al nuevo Pontífice en este significativo momento.

El Papa, quien fue ungido el día anterior, destacó en su homilía que, aunque la fe cristiana es vista como irrelevante o incluso absurda en muchos círculos actuales, especialmente en aquellos dominados por la tecnología, el dinero, el poder y el placer, «precisamente allí, donde la luz del Evangelio parece más tenue, es donde la labor misionera es más necesaria».

León XIV recordó que existen muchas personas, tanto no creyentes como cristianos bautizados, que viven sin sentido, sumidos en lo que él llamó un «ateísmo práctico». A pesar de la aparente aceptación de valores superficiales, la falta de fe, según el Papa, conduce a una vida sin propósito, caracterizada por la indiferencia hacia el sufrimiento y la crisis de la familia. «No basta con ser tolerados o compadecidos; el testimonio auténtico debe ser proclamado con valentía en estos momentos de oscuridad», señaló.

En su discurso, el Papa reflexionó también sobre las «atroces violaciones de la dignidad humana» y la falta de misericordia en la sociedad, subrayando que muchos ven a Jesús como un líder carismático pero no como el Hijo de Dios. Esta visión errónea no solo afecta a los no creyentes, sino también a muchos cristianos que han dejado que su fe se reduzca a una mera formalidad.

«Este es el mundo que se nos ha confiado», dijo León XIV, siguiendo el ejemplo del Papa Francisco, quien nos exhortó a dar testimonio con alegría y valentía de nuestra fe en Cristo Salvador. «Donde falta la fe, la vida pierde su sentido», advirtió el Papa, recordando la importancia de vivir en conformidad con las enseñanzas del Evangelio.

La misa comenzó con unas palabras en inglés, en las que agradeció a los cardenales por su apoyo y confianza, y enfatizó la importancia de trabajar juntos como una comunidad unida en la fe.

El Papa también se refirió a su misión como sucesor de San Pedro, recordando que fue llamado a «llevar esa cruz» y ser fiel administrador del «tesoro de la fe» que le ha sido confiado para el bien de toda la Iglesia.

En su reflexión final, León XIV citó las palabras de San Pedro en el Evangelio según San Mateo: «Tú eres el Cristo, el Hijo de Dios vivo», resaltando que esta fe ha sido preservada y transmitida por la Iglesia a través de la sucesión apostólica durante dos mil años.

El programa de León XIV para los próximos días incluye la oración del Regina Coeli el domingo a las 12 del mediodía desde la Logia central de la Basílica de San Pedro, y una reunión con los trabajadores de los medios acreditados ante la Santa Sede el lunes a las 10 en el Aula Pablo VI.