Javier Blanco, secretario de ADIUC: «El salario docente sigue por debajo de la canasta básica»
El secretario general de ADIUC, Javier Blanco, advirtió que el salario de los docentes universitarios no alcanza la canasta básica. En medio de un nuevo paro en las universidades nacionales, el gremio denuncia la precarización laboral y la pérdida del poder adquisitivo.
En un contexto de creciente malestar entre los docentes universitarios, Javier Blanco, secretario general del sindicato ADIUC, lanzó una fuerte advertencia sobre la situación salarial de los educadores. Según Blanco, el salario de los docentes no solo quedó rezagado frente a la inflación, sino que en muchos casos no llega a cubrir la canasta básica, lo que agrava la situación económica de quienes sostienen la educación superior.
«Hoy, el cargo testigo, aun trabajando full time, está por debajo de la canasta básica», señaló Blanco en una entrevista con Marca Informativa Córdoba. Según detalló, con el último aumento de julio, el salario para un docente con dedicación exclusiva apenas alcanza los 700.000 pesos, cifra que no logra cubrir las necesidades básicas de una familia tipo. «Esto es insostenible, especialmente cuando solo el 5% de los docentes tiene dedicación full time, y la mayoría debe conformarse con cargos de menor dedicación debido a la falta de oportunidades laborales», agregó.
La situación de los docentes universitarios no se limita a la insuficiencia salarial. Blanco resaltó que la precariedad laboral es una problemática creciente en las universidades nacionales. «La sobrecarga de trabajo es enorme, no porque sobren docentes, sino porque faltan. Esto se refleja en la cantidad de estudiantes por profesor y en la imposibilidad de muchos de acceder a un cargo con dedicación completa», expresó.
El conflicto se intensificó en las últimas semanas. Los docentes universitarios realizaron un paro de 24 horas la semana pasada, y en los próximos días se llevarán a cabo nuevas medidas de fuerza, incluyendo una clase pública sobre inteligencia artificial y un festival en defensa de la universidad pública. Estas acciones buscan visibilizar el descontento en la comunidad educativa y llamar la atención de la sociedad sobre la importancia de revertir la situación.
El reclamo de ADIUC no es solo económico. Blanco subrayó que la falta de inversión en educación superior tiene implicaciones graves a mediano y largo plazo. «No solo se trata de recuperar el salario, sino de los proyectos de investigación y extensión que se ven interrumpidos. Muchos docentes han dejado la universidad porque no les alcanza para vivir, lo que pone en riesgo el futuro de la educación y la investigación en el país», advirtió.
Además, Blanco señaló que la oferta salarial del gobierno nacional no solo está por debajo de la inflación, sino que evidencia una intención de desfinanciar la educación superior. «Nos han dado una recomposición salarial que nos deja casi 20 puntos por detrás de otros trabajadores estatales. Esto no es solo un problema presupuestario, sino también ideológico. Es inaceptable que la universidad, un espacio crucial para el desarrollo del país, sea tratada con semejante desdén», afirmó.
La situación es tan crítica que se habla de una nueva marcha para mediados de septiembre, similar a la realizada en marzo, que contó con un amplio apoyo de estudiantes, docentes, y la sociedad civil. «La universidad pública es emblemática de los problemas que enfrenta el país. Es fundamental que toda la sociedad se sume a esta lucha, porque lo que está en juego es el futuro de la educación y el desarrollo del país», concluyó Blanco.
