Seis víctimas en seis días por monóxido de carbono en Córdoba: qué tener en cuenta para evitar otra tragedia
Dos hermanos murieron este martes en barrio Residencial San Carlos. Las autoridades insisten en extremar los cuidados con artefactos de calefacción y ventilación de ambientes. El toxicólogo Daniel Gómez advierte sobre el alto riesgo de ingresar a lugares cerrados con posible presencia del gas.

Una nueva tragedia vinculada al monóxido de carbono conmocionó a Córdoba esta semana. Dos hermanos mayores fueron hallados sin vida en su casa del barrio Residencial San Carlos, en la zona sur de la ciudad de Córdoba. Con este hecho, ya son seis las muertes por intoxicación en apenas seis días en la provincia.
El hallazgo ocurrió en una vivienda de calle Chascomús al 1900. Según informaron fuentes policiales, los vecinos dieron aviso al notar que no veían a los adultos mayores desde hacía algunos días. Al ingresar, los agentes encontraron a ambos sin signos vitales y el horno de la cocina encendido. No había indicios de violencia ni de robo.
Las víctimas tenían entre 70 y 80 años. Uno de ellos, según contaron vecinos, tenía problemas de salud. La mujer era una docente jubilada. “Siempre los veíamos barriendo, cortando el pasto. Eran personas tranquilas, muy queridas”, dijo un vecino del sector a medios locales.
El peligro invisible que no da segundas oportunidades
El monóxido de carbono (CO) es un gas tóxico, inodoro e incoloro, que se produce por mala combustión de artefactos a gas, leña o kerosén. Es letal aun en exposiciones cortas si la concentración es alta.
El médico toxicólogo Daniel Gómez explicó a Puntal la gravedad de estos casos y advirtió sobre el riesgo extremo de ingresar a un lugar cerrado sin la debida protección:“El problema de encontrar a alguien desvanecido en una casa es que, si uno entra sin protección, lo más factible es que tengamos no una, sino dos víctimas: la persona afectada y quien intentó ayudarla. Por eso, es fundamental no ingresar. Abrí puertas o ventanas desde afuera si podés, pero no entres. Esto lo deben hacer los bomberos, que tienen equipos de respiración autónoma.”
Gómez detalló que, en situaciones de emergencia, los rescatistas capacitados a veces ingresan atados con una cuerda: “Si el bombero se desmaya adentro, el otro lo puede retirar. El monóxido de carbono no perdona a nadie. Es un gas silencioso, pero sumamente peligroso.”
Además, destacó que “el CO es un gas que no se ve ni se huele, y puede causar síntomas iniciales como dolor de cabeza, náuseas, mareos o somnolencia, pero muchas veces la gente no se da cuenta a tiempo”. En este sentido, señaló que “la intoxicación da poco margen de reacción. Si estás solo y te dormís, probablemente no te despiertes”.
Seis muertes en seis días
El fallecimiento de los dos hermanos en barrio Residencial San Carlos se suma a una preocupante seguidilla de episodios fatales ocurridos en distintos puntos de la provincia de Córdoba en los últimos días. El pasado domingo 6 de julio, una mujer de 79 años fue hallada sin vida en su casa del barrio Los Paraísos. Su nieto encontró la perilla del horno abierta y un fuerte olor a gas en el ambiente, lo que hizo sospechar de una intoxicación.
Días antes, el viernes 4, una tragedia sacudió a la ciudad de Cosquín, donde una mujer de 65 años y su nieta de 10 murieron dentro de un departamento. Bomberos constataron deficiencia de oxígeno y presencia de monóxido de carbono, lo que confirmó la intoxicación.
El miércoles 2 de julio, otro hombre de 78 años fue derivado desde el barrio Villa Libertador al Instituto del Quemado, también con signos de intoxicación por gases. Aunque logró ser trasladado con vida, su cuadro encendió las alarmas por la reiteración de estos eventos.
Con estos casos, ya son seis las víctimas fatales por monóxido de carbono en apenas seis días en Córdoba.
En 2024, se reportaron más de 500 casos de intoxicación por monóxido de carbono en Argentina. En lo que va de 2025, ya se confirmaron 473 casos, según datos del Ministerio de Salud de la Nación.
Prevención: las claves
Frente al aumento de casos de intoxicación por monóxido de carbono, las autoridades sanitarias y energéticas remarcan la importancia de una serie de medidas básicas, pero fundamentales, para prevenir nuevos episodios. La clave está en garantizar la correcta instalación, uso y mantenimiento de todos los artefactos de calefacción.
Es fundamental realizar revisiones periódicas de estufas, calefones y hornos, siempre con gasistas matriculados, y asegurarse de que los conductos de ventilación no estén obstruidos ni presenten deterioro. También es importante observar la llama de los artefactos: si no es de color azul y se torna amarilla o anaranjada, puede estar indicando una combustión defectuosa que libera gases peligrosos.
Las cocinas deben utilizarse exclusivamente para cocinar: nunca se deben emplear hornallas ni el horno como método de calefacción. Además, es necesario ventilar los ambientes todos los días, aunque haga frío, y no tapar ni bloquear las rejillas de ventilación. En baños y dormitorios, solo están permitidos los artefactos de tiro balanceado, que aíslan la combustión del ambiente interior.
Otras medidas vinculadas al uso eficiente de la energía también pueden contribuir a la seguridad y al ahorro. Se recomienda regular los termostatos a temperaturas adecuadas, entre 18 y 21 grados en invierno, y entre 24 y 25 en verano, apagar los pilotos cuando los equipos no se están utilizando y evitar el uso innecesario de agua caliente.
A la hora de cocinar, es mejor tapar las ollas para conservar el calor y minimizar el consumo de gas. También se aconseja desconectar los electrodomésticos cuando no estén en uso y evitar dejarlos en modo stand by, que sigue consumiendo energía.
El invierno recién comienza y las bajas temperaturas intensifican el uso de estufas y calefactores. Frente al enemigo invisible que representa el monóxido de carbono, la prevención puede salvar vidas. Las seis muertes en apenas seis días son una alerta que no puede ignorarse.